Tratamientos para las manchas

El melasma puede ser epidérmico (superficial), dérmico (profundo) o mixto, según la profundidad donde se encuentre la melanina. Cuanto más superficial esté el pigmento, mejor responderá a los tratamientos.

A pesar de los avances que se han producido en el campo de las dermocosmética, el melasma sigue siendo un trastorno difícil solución terapéutica. Uno de los motivos reside en que se requieren entre uno y dos años de tratamiento para lograr resultados satisfactorios, por lo que muchas pacientes abandonan la terapia antes de tiempo.

Para ciertos países el invierno es la mejor época para comenzar el tratamiento, por la falta de sol, sobre todo entre las 10 y las 16 horas. Asimismo, resulta fundamental el empleo de filtros solares de alta protección y amplio espectro.
Otra de las medidas es evitar el consumo de los medicamentos que hayan podido favorecer la parición de las manchas.