Un muy mal habito, comer deprisa

Hoy es uno de los flagelos más graves a nivel mundial, ya que debido a la alimentación industrializada con tantos agregados artificiales, a la que se suma la vertiginosidad de la época y como contrapartida el sedentarismo, nos enfrenta ante este verdadero flagelo que va a ser muy difícil de erradicar, si no se toma conciencia de la importancia de la alimentación en la educación escolar de base y a nivel de políticas firmes de orden mundial.



El alto nivel de productos químicos en alimentos elaborados, como en tierras de cultivo, como en la cría intensiva de animales y el sedentarismo de la vida moderna, alteran nuestro metabolismo provocando elevación del colesterol sanguíneo así como la falla en el distribución y eliminación del exceso de los lípidos, provocando el almacenamiento de los mismos, motivos fundamentales en el incremento del tejido adiposo, lo cual trae aparejados un sin numero de problemas en la salud.

Hoy los niños son afectados cada vez en mayor medida lo cual representa un verdadero problema generacional, ya que se observa el incremento de las enfermedades de carácter inmulógico, relacionadas también a este problema.

Comer deprisa por falta de tiempo o por mal habito, representa un factor importante a corregir, ya que comer rápido implica la falta de masticación adecuada, la cual es en si misma una predigestión, por la acción de la insalivación que favorece el desdoblamiento del bolo alimenticio en el siguiente proceso digestivo en el estomago, el que es sobrecargado de trabajo cuando no se mastica correctamente, lo que induce a una mala absorción posterior de nutrientes a nivel intestinal y con el tiempo un desorden metabólico.

Por lo tanto el hecho de comer deprisa implica comer más y asimilar menos, por ello deberíamos desarrollar el habito correcto de masticar muy bien los alimentos y comer despacio, y hacerlo en un lugar tranquilo estando relajados y disfrutando de la necesidad más natural que nos permite seguir viviendo, lo cual va a favorecer a los procesos digestivos, evitando problemas ya mencionados anteriormente, así como tener en cuenta la importancia de mantener una correcta salud dental, con visitas periódicas al dentista.